Elección de un ave sana

¿Has decidido poner un ave en tu vida? Enhorabuena! Pero debes saber que la elección del ejemplar es muy importante. Hay que saber diferenciar un ave sana de un ave con problemas.

Algunas patologías son invisibles a la vista, ya que pueden pasar desapercibidas sin realizar un chequeo veterinario y una analítica. Pero hay algunas cosas que no deben ser pasadas por alto cuando elegimos nuestra nueva mascota.

No te dejes llevar nunca por la pena. Un pollito con aspecto triste o apagado, problemas asegurados.

¿En que debo fijarme cuando voy a elegir mi pollito?

– Elige un pollito activo y alerta. Si el pollito está apagado, significa que está enfermo. Adquirir un pichón enfermo significa desembolso de dinero en veterinario, medicamentos, pruebas clínicas y puede acabar en la muerte del animal.

– Los ojos y el plumaje deben estar limpios, tener un buen color y ser brillantes. Un plumaje sucio o desordenado puede ser signo de que algo no vaya bien.

– La zona nasal debe estar limpia, sin costras ni secreciones.

– El pichón debe comer solo y estar totalmente emplumado. El empapillado es un proceso que requiere cierta práctica y se pueden cometer errores que son fatales.

– Elige un ave con buen apetito. Eso es signo de buena salud.

– Elige un ejemplar curioso, sin miedos ni signos de agresividad. Aunque esto puede ser corregido, es mejor elegir un ave que no teme las manos y que no reacciona con agresividad a la manipulación.

Tan importante como el estado del pollito son las condiciones en las que se encuentra su ambiente. Las instalaciones deben estar limpias y desinfectadas. No debe hacer olor desagradable o haber restos de suciedad en ninguna parte.

El cuidador o criador, debe poder resolver todas las dudas que nos surjan.  Es importante preguntar cuánto tiempo hace que se destetó el pichón, ya que debemos estar seguros que come por sí solo y que no ha sido forzado a hacerlo para «venderlo rápido».

Hay que observar si las instalaciones tienen acceso a alguna zona exterior donde puedan acudir aves silvestres, potenciales transmisoras de parásitos y enfermedades.

El sexado de los animales no es importante ni determinante, pero algunos criadores nos pueden dar la opción de saber el sexo de nuestro pichón. El testado frente a enfermedades si que es importante, pero este debe haber sido realizado por un veterinario externo, no por el criador para garantizar una seguridad en los resultados.

Algunos criadores pueden darnos la opción de ver a los padres, estos deben gozar de buen aspecto físico y buena salud. Deben recibir una dieta variada, adecuada para su especie.

Los pichones deben ser alimentados también con una dieta variada, adecuada a su especie y edad. A más variedad de alimentos, mejor se adaptará.

Si seguimos estos consejos, podremos tener un pichón sano, equilibrado que nos dará muchas satisfacciones.