Alergias en loros

Las alergias en los loros son un tema bastante desconocido. Definiendo, una alergia es una respuesta exagerada del organismo a un antígeno (una sustancia externa al cuerpo) que estimula el sistema inmunitario. Tiene diversas manifestaciones clínicas que abarcan desde síntomas respiratorios a picores. La respuesta a la alergia depende del individuo.

Existen test para determinar que nos está produciendo alergia. Estos tests están disponibles para humanos y perro, pero desgraciadamente no para aves.

Aparte de estos test específicos, el hemograma nos ayuda a diagnosticar las alergias, ya que el aumento de los eosinofilos puede indicar este problema. La eosinofilia no es exclusiva de las alergias, otras patologías como las parasitosis también la producen.

 

Ya hemos visto que son las alergias. Pero… ¿que las producen?

Polen: esto produce alergias estacionales, especialmente en primavera e inicio del verano, cuando las plantas florecen y producen polen. El polen puede causar alergia en algunas especies de aves. Esto suele afectar a los loros alojados en el exterior. Suele causar síntomas respiratorios, pero también picores.

«Caspa» de especies australianas: las cacatúas y las ninfas producen un polvillo o caspa blanca en sus plumas que ayuda a mantener el plumaje en buenas condiciones, pero que puede causar alergias en las especies americanas. Esto se produce cuando se mantienen diferentes especies en un espacio cerrado con poca ventilación. Normalmente produce síntomas respiratorios.

Alimentos: las alergias alimentarias a los alimentos también son frecuentes, especialmente a frutos secos (cacahuetes, nueces, etc.)  y a algunas frutas frescas (kiwi, sandia, etc.). Las alergias alimentarias son de aparición súbita y no son estacionales. No siempre se produce al introducir un nuevo alimento, ya que la respuesta alérgica puede producirse en cualquier momento.

Aditivos: los aditivos de los piensos formulados y las comidas preparadas pueden causar reacciones alérgicas en algunas aves. Entre estos aditivos incluimos los colorantes alimentarios, de los cuales ya se habla en otro artículo.

Los síntomas de las alergias en las aves son los siguientes:

– Agresividad. El malestar de la alergia puede producir una  agresividad anormal en el ave.

– Prurito. Es una manifestación muy frecuente de las alergias. Todos los alérgenos pueden producir picores, que se manifiestan en forma de nerviosismo, rascado compulsivo e incluso picaje de las plumas y automutilación.

– Picaje. El picaje es un síndrome multifactorial que puede deberse a muchas causas y las alergias son una de ellas. Normalmente el picaje en este caso es una manifestación extrema de picor, ya que las alergias pueden causar prurito en la piel de las aves. En casos graves pueden incluso mutilarse la piel.

– Dermatitis. Se observan las patas costrosas o la piel enrojecida.

– Diarreas. Las alergias alimentarias pueden producir diarreas agudas, por una reacción del intestino al alérgeno. No hay que confundirlo con una intolerancia alimentaria, que se basa en que el alimento no puede ser digerido.

– Sintomas respiratorios. Estornudos, descarga serosa nasal, etc.

– Sintomas oculares. Conjuntivitis serosa.

Cuando nuestro loros sufre alguno de estos síntomas podemos sospechar de una alergia. Deberemos investigar los elementos a los cuales el loro está expuesto, para poder descartar que le produce alergia. Las alergias pueden ir a peor, ya que el cuerpo se sensibiliza ante los alérgenos y esto puede significar que las siguientes respuestas sean más graves. En personas esto se resuelve con una inyección de epinefrina, en caso de reacción alérgica grave o reacción anafilactica. Pero en loros esta opción es inviable.

¿Cómo puedo prevenir las alergias en mi loro?

Es imposible tener todos los factores controlados, ya que es impredecible conocer que puede producir alergia a nuestro loro en concreto. En caso de tener un loro alérgico al polen evitaremos que esté en el exterior de la casa en época de floración de las plantas. Un purificador de aire también puede ser útil en caso de alergias ambientales (polvillo de las plumas de otros loros, polen, polvo, etc.). Ventilar bien la habitación donde tenemos al loro también es importante.

La dieta también es muy importante. Hay que reducir al máximo los piensos coloreados o aquellos con aditivos potencialmente alergenos. Controlar los frutos secos que le proporcionamos a nuestros loros y actuar en caso de reacción o observar algún síntoma compatible. Para mantener un buen sistema inmunitario es importante una dieta equilibrada y si es necesario administrar un suplemento vitaminico prescrito por nuestro veterinario.

Existen tratamientos específicos para las alergias. Estos tratamientos deben ser prescritos por un veterinario.

 

Algunas especies son más susceptibles a las alergias que otras.

 

Eclectus: son muy sensibles a las alergias alimentarias, especialmente a los aditivos y los colorantes de los piensos. También es relativamente frecuente la alergia al maíz en esta especie.

 

Amazonas: los amazonas son susceptibles a las alergias por polen y también al polvillo de las plumas de las especies australianas. Las manifestaciones tipicas de estas alergias son respiratorios, oculares y dermatológicos.

 

Caiques y forpus: los caiques también son susceptibles a las alergias ambientales procedentes del aire. La conjuntivitis es una manifestación frecuente en estas especies.

 

Cotorra argentina: vigilaremos las alergias alimentarias, especialmente a los aditivos y las alergias ambientales (polen, polvo, etc.). Suelen manifestarlo con alteraciones comportamentales y picaje.